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Arquitectos: DTR_studio
- Área: 115 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Cris Beltran
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Proveedores: Deceuninck, Fassa Bortolo S.p.A., Hitachi Air Conditioning, Knauf, Soler & Palau, Zambelis
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Tras 20 años en nuestra sede del Realejo, había llegado el momento de cambiar. Decidimos hacer un cambio radical, pasar de un dúplex situado en la colina del Mauror a una casita-patio de los años 60 de protección oficial en Ciudad Jardín de los Vergeles.
Tipológicamente se trata de una vivienda en hilera de dos plantas, alternando una fila con jardín delantero y patio trasero con otra hilera con acceso directo desde la calle y patio trasero. El estudio se sitúa en esta segunda tipología, con una vocación más comercial, con acceso desde la Calle Violetas, que tiene un carácter de espacio semi privado al estar dimensionada para dar servicio exclusivo a los habitantes de las viviendas que la circundan.
La Arquitectura ofrece un ejemplo muy claro de la arquitectura racional de la época: Entrada en recodo, patio con porche cubierto, muros de carga en fachada de ladrillo hueco doble, crujías intermedias con pilares y vigas de gran canto de hormigón, escalera hecha con bóveda de ladrillo.
Siendo la sencillez el nexo en común en los materiales y las soluciones constructivas empleadas. El proyecto de reforma y adaptación a oficina de la vivienda trata de poner en valor todo esto. Se parte de un edificio que ha sufrido numerosas reformas a lo largo del tiempo, desvirtuando su concepción original. Por tanto, el proyecto se encargará de limpiar y potenciar los valores originales del inmueble.
Los conceptos por los que discurre la intervención son (1) recuperar la escala original del patio, (2) eliminar toda la tabiquería excepto el cierre de la escalera de acceso a planta alta, que servirá de núcleo de todas las instalaciones, (3) mostrar hacia el interior la materialidad de la vivienda que responden a una época y una forma de entender la construcción muy concreta, (4) contraponer los elementos originales con acabados y texturas nuevas que enriquezcan la propuesta y (5) aprovechar la intervención en fachada para mejorar la eficiencia energética del inmueble y proponer un lenguaje que haga que el edificio destaque pero sin perder de vista las soluciones del entorno
La planta baja alberga la parte más pública del estudio, aprovechando la relación directa con la calle. Se propone compartimentar el espacio usando estanterías móviles, de tal forma que se pueda adaptar el espacio a los diferentes usos que se necesiten.
La planta alta será la zona de trabajo, con más privacidad y mejor soleamiento. El mobiliario se ha diseñado adaptado al espacio existente para conseguir el máximo aprovechamiento. Además el balcón exterior, con el juego de las persianas de madera, ofrece un espacio intermedio con un carácter distinto al del espacio de trabajo y actúa en verano como amortiguador de la radiación solar.